experiencia encantadora en un entorno natural

El trato personalizado del dueño fue excepcional, siempre dispuesto a ayudarnos con recomendaciones sobre rutas y visitas. La piscina exterior, rodeada de naturaleza, ofrece un ambiente perfecto para relajarse, y las vistas al río Duero son realmente impresionantes.

El desayuno podría mejorarse en variedad.

Ambiente perfecto para relajarse.

El hotel tiene un ambiente encantador y vistas espectaculares al río. Sin embargo, el desayuno necesita más variedad. Además, disfrutamos de actividades como el piragüismo.

encanto y tranquilidad en cada rincón

Disfruté de una casa rural auténtica, con un personal increíble que nos hizo sentir muy bienvenidos y unas vistas espectaculares que enriquecieron nuestra estancia, además de estar a poca distancia de la Plaza Mayor, ideal para pasear y disfrutar de su ambiente vibrante, y del Museo del Tren, donde uno puede sumergirse en la historia de la región.

El Spa es espectacular y el masaje de chocolate es una experiencia única. Además, las habitaciones tienen vistas espectaculares al Duero.

me sentí inmediatamente como en casa, no tengo ninguna queja en absoluto

Disfrutamos de un masaje de café muy relajante en el spa, seguido de un té en las hamacas que realmente acabó de completar la experiencia. Las vistas al río Duero desde nuestra habitación eran impresionantes.

La amabilidad del personal, la tranquilidad del entorno y la atención al detalle fue simplemente sobresaliente.

La habitación era muy cómoda, con una cama y almohadas que te hacían sentir como en casa. Además, las vistas al río Duero son espectaculares. Estar allí es un lujo. sin ruidos y con el canto de los pájaros al despertar. Lo único que podría mejorar es el servicio en las cenas, pero el lugar y el ambiente lo compensa todo.

1 Vistas al río
2 Atención excepcional
3 Spa maravilloso
4 Habitaciones impecables

1 Desayuno mejorable
2 Variedad limitada

Pasamos dos noches maravillosas en un lugar encantador, donde el desayuno nos dejó con ganas de más. La experiencia del spa fue inolvidable, especialmente el masaje de chocolate. ¡Volvería sin dudarlo!

Las áreas comunes eran amplias y tenían una decoración acogedora, lo que hacía que me sintiera cómoda. Además, la accesibilidad era excelente con rampas en cada entrada, facilitando mucho el movimiento dentro del hotel.

Mejorar la calidad del desayuno ofrecido.

Disfrutamos de un ambiente único rodeado de naturaleza. La piscina exterior fue un gran acierto, especialmente para los niños. El dueño nos mostró una bodega cercana y nos regaló un momento musical que hizo la estancia aún más especial. ¡Una experiencia memorable!

A mis hijos les hubiera gustado más variedad en el desayuno.

La habitación era amplia y muy limpia, con unas vistas espectaculares al río. La piscina exterior también fue uno de los puntos más disfrutados, amplia y limpia, ideal para relajarse.

El desayuno fue bastante escaso, lo que podría mejorar la experiencia. También, la bañera de la habitación, aunque bonita, no resultó muy práctica y ocupó espacio innecesario.

de verdad que lo aconsejo for una escala de fin de semana

Tranquilo entorno, cómodo alojamiento, ideal para relajarse después de un día de exploraciones, donde el spa ofrece un circuito completo que te deja renovado, y la ubicación facilita el acceso a lugares interesantes como la Plaza Mayor y el Museo del Tren.

No se me ocurre nada